domingo, 28 de octubre de 2018

Continuamos leyendo:

7:43 pm02/21/2017 Noticias Ya.-
NASA propone que Plutón vuelva a ser planeta con nueva definición
Nuestro sistema solar podría contar con cientos de planetas.





Científicos de la NASA publicaron un manifiesto que propone una nueva definición de un planeta, que de ser aceptada agregaría más de 100 nuevos planetas a nuestro sistema solar, incluyendo Plutón y hasta nuestra propia luna.
El cambio clave que el equipo de expertos espera que sea probado es que los cuerpos cósmicos en nuestro sistema solar no necesiten orbitar alrededor del sol para ser considerados planetas, señalando que necesitamos entender sus propiedades físicas y no sus interacciones con estrellas.
En ese entonces la Unión Internacional Astronómica declaró que la definición sería “un cuerpo celeste que orbita alrededor del Sol, tiene masa suficiente para contar con gravedad propia y tiene paso libre alrededor de su órbita”.
Ahora el equipo de científicos liderado por Alan Stern ha propuesto que la definición de planetas sea una “masa subestelar que tiene suficiente fuerza gravitacional para adoptar una forma esférica”.
La definición incluye conceptos más especializados pero básicamente significa que cualquier masa esférica que haya en el espacio y que sea más pequeña que una estrella sería considerada planeta.
Los investigadores aseguran que esta es una mejor definición pues abarca planetas que orbitan libremente en la galaxia y que podría significar un mejor estudio de los cuerpos celestes.
Por supuesto, la luna seguirá siendo solo un satélite natural hasta que la Unión Internacional Astronómica acepte la nueva propuesta de definición de planeta

Ahora que tenemos más clara la definición actual de planeta... pensemos cómo está organizado nuestro Sistema Solar:








Debemos tener en cuenta la siguiente información:


En el sistema ptolemaico, se centra en la Tierra. El orden de las esferas ptolemaicas a partir de la Tierra es: Luna, Mercurio, Venus, Sol, Marte, Júpiter, Saturno y estrellas fijas. Además las órbitas son circulares.
Creer que la Tierra es el centro del universo es la opinión obvia de quien no se plantea hallar una solución a los problemas que presentan los movimientos de los cuerpos celestes, esto es, los movimientos de los planetas.

La teoría heliocéntrica sostiene que la Tierra y los demás planetas giran alrededor del Sol(Estrella del Sistema Solar). El heliocentrismo, fue propuesto en la antigüedad por el griego Aristarco de Samos, quien se basó en medidas sencillas de la distancia entre la Tierra y el Sol, determinando un tamaño mucho mayor para el Sol que para la Tierra. Por esta razón, Aristarco propuso que era la tierra la que giraba alrededor del Sol y no a la inversa, como sostenía la teoría geocéntrica de Ptolomeo e Hiparco, comúnmente aceptada en esa época y en los siglos siguientes, acorde con la visión antropocéntrica imperante.
Más de un milenio más tarde, en el siglo XVI, la teoría volvería a ser formulada, esta vez por Nicolás Copérnico, uno de los más influyentes astrónomos de la historia, con la publicación en 1543 del libro De Revolutionibus Orbium Coelestium. La diferencia fundamental entre la propuesta de Aristarco en la antigüedad y la teoría de Copérnico es que este último emplea cálculos matemáticos para sustentar su hipótesis. Precisamente a causa de esto, sus ideas marcaron el comienzo de lo que se conoce como la revolución científica. No sólo un cambio importantísimo en la astronomía, sino en las ciencias en general y particularmente en la cosmovisión de la civilización. A partir de la publicación de su libro y la refutación del sistema geocéntrico defendido por la astronomía griega, la civilización rompe con la idealización del saber incuestionable de la antigüedad y se lanza con mayor ímpetu en busca del conocimiento.

martes, 25 de septiembre de 2018

¿Un planeta?

Leamos la siguiente noticia:

25/08/2006 - 00:00 Clarin.com Sociedad
ASTRONOMÍA : CUMBRE DE EXPERTOS EN PRAGA

Plutón, al descenso: ahora en el Sistema Solar hay 8 planetas

Científicos de todo el mundo votaron cuáles son las condiciones que debe cumplir un astro para ser considerado un planeta. Plutón fue clasificado en una nueva categoría, la de enano.
Cayó Plutón. Los astrónomos del mundo votaron cuáles son las condiciones que debe cumplir un astro para ser considerado un planeta y esa definición hizo las veces de golpe de Estado galáctico. Cayó Plutón, ya no es más planeta. Bueno, sí lo es, aunque perdió un grado: es ahora un planeta "enano".
En su último día de deliberaciones, la Unión Astronómica Internacional (UAI), reunida en Praga, capital checa, clausuró su congreso de diez días con una decisión  histórica: decirle al mundo que los planetas del Sistema Solar no son nueve, sino ocho: Mercurio, Venus, nuestra Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno.
En este mundo lleno de enciclopedias y definiciones llama la atención de los legos saber que hasta ayer no había consenso para decir qué cosa es un planeta. Las deliberaciones fueron duras. Por un lado, los que proponían ampliar el número de planetas que orbitan alrededor de nuestro Sol. Hace apenas 10 días, en el comienzo del congreso, trascendió que una de las propuestas era subir a 12 el número de planetas. Caronte, el astro que orbita alrededor de Plutón —en verdad, cada uno órbita al otro— era otro candidato al título mayor, junto con Ceres y el alejadísimo Xena. Este grupo proponía una definición más amplia y tal laxitud irritaba a los defensores de otra postura. Los que hicieron rodar la cabeza de Plutón y confinaron también a los otros a la categoría de "enanos".
Pero...


y...

Planeta: Mercurio
Diámetro: 4880km
Satélites: 0
Distancia al Sol: 57,91 millones km o 0.39UA
Planeta: Plutón
Diámetro: 2390km
Satélites: 5 (Caronte, Nix, Hydra, P4 y P5)
Distancia al Sol: 39,44 UA o (5,934'456,500 kilómetros
Entonces si no es por tamaño ¿Cuál/es es/son los criterio/s para determinar el “enanismo” de Plutón?


Continuemos leyendo la noticia:

Los astrónomos —unos 2.500 de 75 países— votaron a mano alzada qué condiciones debe cumplir un planeta. "La palabra 'planeta' designaba inicialmente a los 'vagabundos' del cielo, es decir, los puntos de luz que se movían en relación a las estrellas. Los descubrimientos recientes nos llevan a una nueva definición (...) En consecuencia, la Unión Astronómica Internacional decidió repartir los planetas y los otros cuerpos de nuestro Sistema Solar en tres categorías":
Primera categoría: "Un planeta es un cuerpo celeste que está en órbita alrededor del Sol, que tiene suficiente masa para tener gravedad propia para superar las fuerzas rígidas de un cuerpo de manera que asuma una forma equilibrada hidrostática, es decir, redonda, y que ha despejado las inmediaciones de su órbita".
Segunda categoría: "Un planeta enano es un cuerpo celeste que está en órbita alrededor del Sol, que tiene suficiente masa para tener gravedad propia para superar las fuerzas rígidas de un cuerpo de manera que asuma una forma equilibrada hidrostática, es decir, redonda; que no ha despejado las inmediaciones de su órbita y que no es un satélite".
Tercera categoría: "Todos los demás objetos que orbitan alrededor del Sol son considerados colectivamente como cuerpos pequeños del Sistema Solar".
Con esto, un gran problema de Plutón, que gozaba del título de planeta desde su descubrimiento, en 1930, es que no cumple con el requisito de tener su órbita despejada. Plutón vaga como el más grande de una vasta comunidad de objetos que habita en un cinturón de asteroides. Su flaqueza para dispersar las inmediaciones de su espacio fue su ruina.

domingo, 26 de agosto de 2018


A continuación más información sobre el Sol:


En el cielo las estrellas...

    Las estrellas, del mismo modo que el Sol, son inmensas bolas de gas en proceso de fusión nuclear que desprenden enormes cantidades de energía al espacio. Por este motivo, las miles de estrellas que vemos durante la noche, son soles que, al estar mucho más lejos que el Sol, nos parecen muy pero muy chiquitos. El tamaño de las estrellas es muy variable. A las estrellas más grandes se las llama supergigantes y, a las más pequeñas, enanas. Por ejemplo, nuestro Sol está clasificado como una estrella enana amarilla.

Las enormes cantidades de energía implican luz y calor, por lo tanto, son cuerpos que emiten luz. Es decir, que el Sol es una estrella, y es la única en el Sistema Solar.

   El color amarillo del Sol indica que, en el borde, su temperatura es cercana a los 6000 grados centígrados. Al ser, fuente de luz y calor, y por lo tanto, de la vida en el planeta (no es el único factor), el hombre en el transcurso de la historia lo ha adorado.

 La distancia del Sol a la Tierra es de 150.000.000 km o 1 un año luz (AU). Mientras que la distancia de la Tierra a la próxima estrella más cercana es de 41,3 billones de kilómetros o 4,37 años luz.

domingo, 12 de agosto de 2018


A partir de sus dibujos sobre el Sistema Solar...

¿Qué elementos hay en tu dibujo?
¿Hay algún centro? ¿Qué elemento lo ocupa?
¿Qué elemento falta?

¿Cómo hicieron para imaginarlo?

A continuación se presenta información sobre lo que representaba el Sol en diferentes culturas.
Registren en sus carpetas:

1)   ¿Qué importancia le daban al Sol?
3)     ¿Qué coincidencias interculturales reconocen en relación al lugar que el Sol ocupaba?


Según los egipcios...


Estatua de Hathor, en el museo de Luxor, portando el disco solar.
Para los egipcios el sol representaba germinación, calor y luz. Esto hizo que las deidades solares fueran importantes.
En Egipto, el culto al Sol prevaleció durante siglos y se asoció su poder a muchos dioses, como Horus, Ra, Uadyet, Sejmet, Hathor, Nut, Isis, Bat y Menhit. A partir de la quinta dinastía, los dioses locales se funden con Ra para crear divinidades sincréticas: Atum-Ra, Min-Ra o Amón-Ra.
Durante la dinastía XVIII, el faraón Akenatón cambió, temporalmente, el politeísmo que se practicaba en Egipto, proclamando un monoteísmo en torno a Atón, representado por el disco solar, posiblemente para contrarrestar la gran influencia del clero de Amón.                                                                                                        


Según los mesopotámicos...



El dios sumerio del sol Utu (en acadio Shamash), que era al mismo tiempo dios de la justicia, jugó un importante papel en la zona mesopotámica durante la Edad del Bronce. Formaba parte de una tríada astral junto al dios lunar Nanna (en acadio, Sin) y la diosa del amor y de la guerra Inanna, cuyo símbolo era la estrella de la mañana.
Utu era el señor de la luz y por su posición estelar podía ver todo lo que pasaba en la Tierra y por eso podía impartir justicia.


Según los griegos...



En Grecia, el dios del sol era Helios quien era concebido como un hermoso dios que usaba una corona aurífera de gran y poderoso brillo. Él conducía un carro por el cielo cada día hasta el océano, río perfecto que circundaba la tierra, Gea.
Homero señala al carro de Helios como tirado por toros de fuego, aunque Píndaro lo escribió que por «corceles que
 arrojaban fuego».
Hesiodo también indica a Eos como una diosa solar griega asociada a la aurora, siendo hija del titán Hiperión y Teia.


Según los Incas...

   



La cultura inca, asentada en lo que hoy es el Perú, Ecuador, Bolivia, parte de Chile y Argentina tenía como deidad más importante al Dios Sol llamado Inti. El Inca o emperador, era considerado hijo de Inti. Se dice en la leyenda de Manco Cápac y Mama Ocllo que ellos fueron enviados por su padre el Sol. Considerado por las dinastías incaicas como el Sumo Hacedor. Con la colonización española, y la religión católica impuesta, los súbditos del imperio inca fueron obligados a que dejaran de adorarlo. La esposa de Inti, Quilla, era la Luna, diosa de la mujer y de los quehaceres femeninos. En honor al dios sol se celebra cada 24 de junio el Inti Raymi y en diciembre el Cápac Raymi.


  Según los Mayas...


Señor del ojo del sol. En la mitología maya, Kinich Ahau era el dios del Sol y patrono de la música y la poesía; estaba casado con Ixchel, la Luna. Se le considera una de las advocaciones de Itzamná o Zamná.
Era el gobernante de los dioses, y como tal solucionaba los problemas y distribuía las tierras entre los diferentes pueblos. También era el dios de la guerra.3
Los sacerdotes de sus templos recibían el nombre de Ah Kin, los del Sol y del Tiempo, y profetizaban el futuro de los hombres.


Según los Aztecas...

Tonatiuh o Tonatiuhtéotl (en náhuatl: tonatiuh, ‘el sol’tonatiuh, sol’)? en la mitología Azteca es el dios del Sol. El pueblo mexicano lo consideró como el líder del cielo. También fue conocido como el Quinto Sol, debido a que los mexicas creían que asumió el control cuando el Cuarto Sol fue expulsado del cielo, y de acuerdo a su Cosmogonía, cada sol era un dios con su propia era cósmica y según los aztecas, ellos aún se encontraban en la era de Tonatiuh (Nahui-Ollin).
Según cuenta el mito mexica que los dioses, después de la muerte del cuarto sol, buscaban al quinto nuevo sol. Encontraron a dos dioses, a Tecusiztécatl, un hombre cobarde pero orgulloso de sí mismo, y Nanahuatzin, un dios noble y muy pobre. Cuando se sentaron alrededor de la pira (fogata para sacrificios) dijeron los dioses que debían sacrificarse en la misma pira para ser el quinto sol. Tecuciztécatl se metió en la pira y del dolor, se salió. Quedó manchado y se cuenta que así surgieron las manchas en el jaguar. Después de la cobardía de Tecuciztécatl, Nanahuatzin se metió en la pira, salió una chispa hacia el cielo y éste mismo se iluminó, surgiendo así el quinto sol. Luego de ver Tecuciztécatl al dios pobre, que se había convertido en el quinto sol, le dio envidia y se metió en la pira. Así surgió una nueva chispa, se lanzó al cielo y apareció un segundo sol. Era invencible. Llegó el momento en que lo mataron los dioses menores. En todo el trayecto de la batalla de los dioses menores con Tecuciztécatl, Nanahuatzin se quedó callado. El segundo sol, murió porque uno de los dioses menores le lanzó un conejo y lo atravesó. De esta forma, murió y se convirtió en la Luna, y se cuenta que vemos un conejo en la Luna por el conejo que le lanzó el dios. Nanahuatzin luego de esto, se autonombró Tonatiuh.

lunes, 9 de julio de 2018

Fotos satelitales de la Tierra






A lo largo de la historia las diversas culturas han buscado dar explicaciones sobre la forma de la Tierra. 

Algunas de las preguntas que surgen son:

¿Cómo sabemos nosotros que la tierra es redonda?

§               ¿Cómo podríamos mostrar o demostrar que la tierra es redonda? Teniendo en cuenta que en el medio del campo vemos que el piso es plano, cuando miramos el horizonte en el mar también.

¿Cómo imaginan que hicieron en la antigüedad para corroborar sus ideas?

¿Qué observaciones creen que habrán hecho para sostener esa forma de la Tierra?

Leamos el siguiente texto:


Eratóstenes nació en Cirene en el año 276 a. C y se cree que era de origen caldeo. Fue matemático, astrónomo y geógrafo. Alrededor del año 255 a. C fue nombrado director de la Biblioteca de Alejandría por el rey Ptolomeo Evegetes. Trabajó con problemas de matemáticas, como la duplicación del cubo y los números primos. Hemos podido conocer algo de sus trabajos, merced a comentarios y citas de otros autores.

               Una de sus principales contribuciones a la ciencia y a la astronomía fue su trabajo sobre la medición de la Tierra. Estando en la Biblioteca de Alejandría, encontró un informe
de observaciones sobre Siena, ciudad situada a unos 800 Km. al sur de Alejandría, en el que se decía que el día del solsticio de verano (21 de junio) a mediodía, los objetos (como por ejemplo, los obeliscos) no producían sombra y en el fondo de los pozos podía verse la luz del sol. Esto se debe a que está ciudad está sobre la línea del trópico (en realidad, 33' al norte del Trópico de Cáncer) Eratóstenes realizó observó que, en Alejandría, el mismo día y a la misma hora no se producía este mismo hecho. Asumió de manera correcta que el Sol se encontraba a gran distancia y que sus rayos, al alcanzar la tierra, lo hacían en forma (prácticamente) paralela. Esto ratificaba su idea de que la superficie de la Tierra era curva pues, de haber sido plana, no se hubiese producido esta diferencia entre las dos ciudades.

               Las únicas herramientas de Eratóstenes fueron palos, ojos, pies y cerebro, y además el gusto por la experimentación. Con estos elementos dedujo la circunferencia de la Tierra con un error bastante pequeño, lo que constituye un logro notable para el año en que tuvo lugar.

               Otros logros suyos son: la creación de uno de los calendarios más avanzados de su época y una historia cronológica del mundo desde la guerra de Troya. Realizó investigaciones en geografía dibujando mapas del mundo conocido, grandes extensiones del río Nilo y describió la región de Eudaimon, actual Yemen, en Arabia.
Lectura en el blog.



Información con la que contamos en la actualidad

La forma del planeta Tierra desde el espacio

Recién cuando el hombre tuvo acceso al espacio pudo comprobar con sus propios ojos la esfericidad de nuestro planeta. En 1946 se tomó por primera vez una foto de la Tierra vista desde el espacio desde un cohete V2 del ejército norteamericano a 104 km de altura, en blanco y negro, y de poca calidad, pero muy significativa para conocer más detalles de “nuestra casa”. En 1959 se obtuvieron las primeras fotografías desde satélites. En diciembre de 1972 la tripulación de la nave espacial Apolo 17 tomó una famosa foto llamada “la canica azul” que circuló por todo el mundo como representación de la Tierra vista desde el espacio.

    Hoy, la tecnología ofrece fotos detalladas de la superficie terrestre. Las imágenes obtenidas, la muestran como una gran “pelota” azul con “salpicaduras” blancas. ¿Por qué se ve de ese color? Porque la Tierra está cubierta por la atmósfera, un conjunto de gases que, junto al 70% de su gran superficie cubierta por el agua de los océanos, le dan, desde lejos, esa apariencia. ¿Y las manchas blanquecinas? Simplemente, nubes.

    En el presente sabemos que nuestro planeta no es una esfera perfecta, sino que se presenta como una pelota un poco desinflada. En efecto, tiene los polos algo achatados, de tal manera que su “altura”, la distancia que separa el Polo Norte del Polo Sur, o diámetro polar, es 43 mil metros menor que su “cintura” o diámetro ecuatorial (algo así como 430 cuadras de 100m). A esta forma particular de esfera achatada que tiene la Tierra se le da el nombre de geoide.                                                  

       Diámetro ecuatorial: 12.756km, diámetro polar: 12.713

Consigna

¿Qué longitudes señala el texto?
      ¿Cuáles son las características de la Tierra? Escribilas en el procesador de texto.